La danza ocupa un lugar destacado por lo que se refiere a los finalistas con sello valenciano en los 27º Premios Max. Es el caso de dos de los títulos que compiten en el apartado de Mejor espectáculo de danza: Corps seul, de Christine Cloux, coreógrafa, directora y bailarina suiza, pero residente en Valencia desde hace ya más de dos décadas; y En la oscuridad todo se mueve, producción del Institut Valencià de Cultura (IVC), con coreografía y dirección a cargo de Paula Serrano. Esta última aspira también al galardón a la Mejor coreografía. Cloux, por su parte, al de Mejor intérprete femenina de danza.
Para Serrano, su nominación supone, de algún modo, una apuesta de los Max por “las nuevas generaciones de la danza. Creo que estoy aquí representando a todos los creadores emergentes y eso me hace muy feliz”. En el otro extremo, con una trayectoria profesional de alrededor de cuatro décadas, Cloux asegura sentirse también “satisfecha y emocionada por su nominación, pero sobre todo muy sorprendida, ya que estoy alineada con gente que llega con grandes producciones, escenografía, vestuario… Y el vestuario de mi obra, por ejemplo, lo hizo mi propia madre”.
El listado de finalistas valencianos incluye también, en el apartado de Mejor espectáculo musical o lírico, la obra Bruno, el musical que lo cambió todo, producida por Off Teatro, coincidiendo con la celebración de su 20º aniversario, y escrita y dirigida por Víctor Lucas y Mamen Mengó. “La montamos con mucho esfuerzo y escasos recursos, pero el resultado está a la altura de grandes producciones. De hecho, aunque nació con pocas pretensiones, a lo largo de dos temporadas fue creciendo, gracias al apoyo del público. Por eso, ser ahora finalistas en los Premios Max es el mejor colofón a todo el trabajo que hemos hecho. Para nosotros está siendo como vivir un sueño. Esperamos que esto nos sirva como trampolín para poder seguir propulsando Bruno, el musical que lo cambió todo y expandir fronteras”, apuntan los responsables de la obra.
Por último, Mingo Albir, profesional catalán asentado desde hace más de veinte años en Valencia, figura en la categoría de Mejor diseño de iluminación por su trabajo en Tots eren fills meus, del Teatre Lliure. “No me siento creador. Llevo toda la vida reivindicando los oficios teatrales, como, en mi caso, el de iluminador”, explica, a modo de alegato a favor de aquellos profesionales de las artes escénicas y cuyo trabajo suele quedar fuera del brillo del escenario y los focos. “Nuestra tarea es arropar la idea del director”, concluye.
Al margen de los mencionados espectáculos y profesionales de la Comunidad Valenciana, los 27º Premios Max de las Artes Escénicas – Tenerife parten con Forever, de la compañía vasca Kulunka Teatre, como favorita, con cuatro nominaciones. Otras obras destacadas son Falsestuff. La muerte de las musas, del Centro Dramático Nacional; La casa vacía, de Proyecto Larrua; o Mont Ventoux, de Korsia. El listado completo de finalistas se puede consultar aquí.
Además de las obras a concurso, el certamen ha concedido otros dos premios especiales: el Max de honor, que ha distinguido la trayectoria profesional de la actriz catalana Nuria Espert, y el Max aficionado o de carácter social, que ha reconocido la labor de LaTrup Asociación Teatral Universitaria Troysteatro, afincada en la Universidad de La Laguna (Tenerife). También se entregará por segunda vez el Premio Max aplauso del público a aquel espectáculo que haya cosechado un mayor respaldo de los espectadores teatrales.
Tributo al genio de la dramaturgia Ángel Guimerá
La gala de los 27º Premios Max de las Artes Escénicas – Tenerife se presenta este año bajo el lema La escena, travesías de ilusión y, dirigida por el dramaturgo José Padilla, ganador de dos Max, propone un recorrido por la vida del poeta y autor teatral canario Ángel Guimerá, de quien se celebra el primer centenario de su muerte en julio. “El lema conecta directa y muy íntimamente con el espíritu de Guimerá, por la ilusión de crear que propone en sus obras, la cual nos mueve, nos inspira y nos empuja hacia delante a creadoras y creadores”, explica Padilla.
Así, sobre el escenario del Auditorio Adán Martín se revivirá la travesía marítima que llevó a Guiméra hasta Cataluña, donde se alzó como uno de los máximos exponentes de la Renaixença de las letras catalanas y en el dramaturgo en lengua catalana más destacado de su generación. Llegó incluso a ser propuesto para el Premio Nobel de Literatura en reiteradas ocasiones.
Acerca de los Premios Max
La Fundación SGAE organiza los Premios Max de las Artes Escénicas desde 1998. El galardón es un diseño del poeta y artista plástico catalán Joan Brossa (Barcelona, 1919 – 1998), impulsor de uno de los colectivos renovadores del arte español de posguerra. Los Max se han consolidado a lo largo de todos estos años como el reconocimiento más amplio en el ámbito de las artes escénicas en España.