Desde que cerró sus puertas a mitad de los 90, el edificio del Princesa fue convertido en centro de reunión del movimiento okupa. En 2005, el Ayuntamiento de València inició un informe que estudiaba la viabilidad de expropiar el inmueble con la intención de rehabilitar el antiguo teatro y que acogera una escuela de artes escénicas. Pero el trágico incendio de la madrugada del 27 de febrero de 2009 desbarató cualquier posibilidad de recuperar el edificio. Ese mismo año tuvo que ser derribado.

El final puede ser trágico, pero la historia del Princesa es gloriosa. Se construyó en 1853, siguiendo un diseño del arquitecto José Zacarías Camaña, que antes había sido el encargado de culminar las obras de la fachada del Teatro Principal. Sin embargo, el edificio del Princesa conocido en las últimas décadas era fruto de la reforma que, en 1956, hizo otro arquitecto, Miguel Sanchis.
Curiosamente, fue el nacimiento del Princesa el que propició que el teatro más antiguo de la ciudad de Valencia fuese bautizado como Teatro Principal. Desde que se construyó (acogió la primera función en 1832, con la obra todavía inacabada), el actual Principal se llamaba Teatro del Hospital, por haber sido impulsado -al igual que también el Princesa- por el Hospital General, que desde 1586 tenía el privilegio real de explotar las actuaciones teatrales de València. El caso es que a raíz del nacimiento del Princesa, ese Teatro del Hospital pasó a llamarse Teatro Principal.
Lo explica así el arquitecto y profesor de Física Aplicada en la Universitat Politècnica de València, Arturo Barba Sevillano, en su estudio 'Los arquitectos del Teatro Principal de Valencia (1774-1859), publicado en el volumen CXII del Archivo de Arte Valenciano : "Entretanto, en diciembre del año 1853 el arquitecto que había puesto fin a las obras de la fachada del teatro J. Zacarías Camaña, finalizó la construcción de un nuevo recinto escénico en Valencia, el llamado Teatro Princesa. Debido a ello, el teatro del Hospital, que hasta entonces había sido así designado por los valencianos compartiendo ese número con el de Teatro Cómico o simplemente Teatro, pasó a llamarse Teatro Principal para no ver aminorada su importancia distinguiéndose así del Teatro Princesa y por ser la edificación teatral en activo de mayor antigüedad e importancia en la ciudad de Valencia. El nuevo número fue aprobado oficialmente el 31 de octubre de 1853”. Justo el mismo año en que se construía el Princesa.
A lo largo de su historia de cerca de 140 años, incluidos los años en los que cambió su nombre por el de Teatro Libertad, por el Princesa pasaron el teatro, la música, el cine y otros espectáculos de diversa índole como los de variedades, el humor, la zarzuela, la ópera o la ópera rock, entre otros. Hoy, aunque en los años posteriores al trágico incendio del año 2009 surgió un movimiento para recobrar su espíritu con la construcción de un nuevo centro cultural, en su sitio no hay más que un solar que hace papel de aparcamiento.
